Los '''[[selk'nam]]''' —usual pero erróneamente llamados onas— fueron, con los yaganes y alakalufes, los únicos aborígenes que habitaban la Tierra del Fuego cuando se inició la conquista castellana del actual territorio argentino. Falsamente acusados de antropófagos, eran cazadores y recolectores nómades. Fueron perseguidos y diezmados a fines del siglo XIX por aventureros, tropas nacionales y empresarios inescrupulosos. Los aventureros buscaban oro y el gobierno nacional quería la posesión indiscutida del territorio. Los empresarios, por su parte, habían descubierto que el lugar era óptimo para hacer el mejor negocio del momento: la cría de ovejas naturalmente confinadas. Lo que se sabe de los selk´nam (como se denominaban a sí mismos) se debe a ocasionales visitas de viajeros extranjeros, que los entrevistaron y fotografiaron (a veces de modo notable), y a unos pocos misioneros que aprendieron y registraron su lengua para convertirlos. Actualmente sólo quedan descendientes mestizos que han perdido su forma tradicional de vida, al igual que la mayoría de sus creencias.
<br></center>
[[Archivo:Ona familia por Furlong.jpg|500px|rightcenter|thumb|<small><center>'''Familia ona, óleo de Charles W. Furlong basado en una fotografía propia.'''</center></small>]]