Tecnósfera
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Tecnósfera o tecnosfera, un neologismo todavía no incorporado en el Diccionario de la Lengua Española, designa el ambiente artificial creado mediante las tecnologías por un grupo humano para el desarrollo de sus actividades y la satisfacción de sus necesidades básicas y deseos, ambiente que modifica a su vez la cultura de ese grupo. La más notoria expresión de la tecnósfera son las ciudades, pero no es la única ni la que más afecta a la biósfera, el mundo silvestre. El término parece haber sido creado por el geólogo ruso Vladímir Vernadsky por similitud o contraposición al de biósfera.
Contenido
Introducción
El concepto de tecnósfera alude a las modificaciones que la especie humana ha hecho sobre su medio ambiente, modificaciones que en la actualidad han alcanzado escala planetaria. Si no fuese así, si las personas sólo modificaran su entorno inmediato —su hogar, sus lugares de trabajo y de recreación— la introducción del término tal vez sería innecesaria. Como las personas ajustan inconscientemente su cultura para desenvolverse mejor en su medio habitual, al que crecientemente crean, el concepto involucra un activo, intenso y complejo proceso de realimentación entre las personas y sus obras.
La definición de tecnósfera como ambiente artificial requiere precisar los términos aparentemente triviales de ambiente y artificial.
Lo artificial
Artificial es lo hecho por la mano humana. A veces se usa el adjetivo antropogénico, pero no agrega nada a artificial, sólo etimología griega. Lo artificial no es lo opuesto a lo que habitual o cotidianamente se denomina natural ya que la especie humana es un resultado de la evolución natural y sus actividades son tan naturales como las de las plantas silvestres, los animales salvajes y los fenómenos meteorológicos. No hay un adjetivo que caracterice de modo popularmente no ambiguo a todo lo que no es resultado del accionar humano. Para plantas y animales se puede usar el adjetivo silvestre. Una planta silvestre, por ejemplo, sería aquella no modificada por la actividad humana de selección artificial, como el maíz (cuyo ancestro silvestre parece haber sido el teosintle o Zea perennis). La soja transgénica o el maíz híbrido no son plantas silvestres. Sería risible, sin embargo, hablar de tierras, aguas, aire o piedras "silvestres", ya que el adjetivo no se aplica al mundo inorgánico, también modificado o modificable por la actividad humana.
Ambiente
El ambiente en que viven los habitantes de las ciudades es tan artificial que resulta difícil encontrar un objeto que no haya sido modificado de alguna manera por la mano humana. Si se busca en cualquier hogar se descubren sólo unos pocos objetos completamente naturales: alguna planta decorativa, quizás piedras, minerales, trozos de madera o conchillas recogidas en alguna salida al campo o a la playa. Alguien dirá que si artificial es lo hecho por mano o arte humana seguramente la madera maciza de la silla o la mesa no lo es. Depende de lo que se quiera entender por hecho. Si hacer es crear sustancias que antes no existían, los únicos materiales artificiales son los sintéticos, como los plásticos (véase el artículo materiales). Cuando se hace una silla usando madera de un árbol, se la modifica con las manos usando las técnicas del leñador, del aserradero, del carpintero, del ebanista, para transformar un tronco en un mueble que sirve para sentarse. No es lo mismo hablar de materiales naturales, como la madera, que de objetos naturales, como una piedra. Cuando se profundiza un poco más se descubre que aún ese hermoso geranio que tenemos en la maceta en realidad no es igual a su antecesor silvestre, sino que fue modificado por selección artificial (otra vez la mano humana) para obtener flores más grandes y de más vivos colores. Se descubre también que el aluminio de las ventanas no se encuentra en estado puro en la naturaleza, sino que para obtenerlo hay que someter el mineral que lo contiene, la bauxita, a complejos tratamientos.
Los seres humanos hemos hecho tantas modificaciones a las cosas que nos rodean y de tantas maneras diferentes que es imposible que la persona más experta sea capaz de conocerlas a todas. Los habitantes de las ciudades viven en un mundo casi completamente artificial, creado por el ingenio humano mediante las tecnologías, sin el cual tendría los problemas y sufriría las penurias que acosaron a la especie humana durante la mayor parte de su historia. Estas modificaciones, sin embargo, no se han hecho exclusivamente para satisfacer mejor las necesidades básicas. Han sido mayoritariamente motivadas por el afán de lucro y de poder, del dominio de las personas y del mundo material.
Necesidades básicas
Los seres humanos somos la única especie animal capaz de adaptarse a una enorme variedad de ambientes: habitamos permanentemente todos los climas y lugares de la tierra, desde el ecuador hasta el círculo polar. Solamente los fondos oceánicos no albergan poblaciones humanas permanentes, aunque es previsible que en algún momento también lo harán, así como la luna y otros planetas o satélites del sistema solar. La razón de esta gran adaptabilidad es que los seres humanos, a diferencia de los restantes animales, somos capaces de modificar las condiciones naturales creando nuestro propio ambiente, una tecnósfera de objetos artificiales o de objetos naturales modificados o domesticados (como algunas plantas y animales) para satisfacer nuestras necesidades.
La tecnósfera incluye a la vestimenta, la vivienda, las vías de transporte, el control de la energía.
Sociedad
La tecnósfera se usa para influir las mentes humanas mediante simbolismos como las vestimentas lujosas, edificiones imponentes como las grandes catedrales y concentraciones populares en lugar especialmente concebidos, como los del Tercer Reich.
Medio ambiente
La tecnósfera se crea mediante extracción de recursos de la biósfera, degradándola en el proceso (contaminación ambiental).
Conceptos afines
Antropoceno
El término Antropoceno es usado por algunos geólogos para designar al período geológico presente, en vez del usual Holoceno. Fue acuñado por el químico holandés Paul Jozef Crutzen, quien recibió el Premio Nobel de Química 1995 por sus estudios sobre el agujero de ozono. El término enfatiza el impacto que las actividades humanas han tenido sobre los ecosistemas, impacto que algunos remontan al comienzo de la Revolución Industrial a fines del siglo XVIII y otros sitúan mucho antes, al comienzo de la agricultura y la ganadería hace unos 8.000 años.
El Antropoceno puede interpretarse como el período geológico iniciado en el momento en que el desarrollo de la tecnósfera empezó a tener efectos significativos sobre la biósfera. El cambio climático parece ser la manifestación más generalizada y difícil de controlar del Antropoceno.
Noósfera
Noósfera es un concepto también introducido por Vernadsky, luego adoptado y popularizado por el francés [ Teilhard de Chardin]. Chardin lo usa para designar al espacio virtual donde ocurren los fenómenos mentales y lo considera, junto con Vernadsky, la tercera etapa de la evolución de la Tierra, evolución iniciada por la geósfera (donde priman los procesos geológicos), seguida de la biósfera (cuando la vida coloniza y modifica el planeta) y seguida por la nósfera (donde el saber humano comienza a cambiar la faz de la Tierra).
Evolución de la tecnósfera
En Argentina el ecosistema más modificado por las actividades humanas es la pampa húmeda. En Las cavernas de acero Isaac Asimov pinta lo que podría ser la tecnósfera del futuro.