Con el objetivo de distinguir las diferencias entre los procesos creativos y los procesos repetitivos en los individuos y las organizaciones se distinguen tres tipos de situaciones que explican la naturaleza de las acciones según su contexto:
(i) imaginables: intenciones potenciales de acción, cuyo límite es la imaginación.
(ii) producibles: capacidades de acción, cuyo límite es la disponibilidad de recursos.
(iii) necesarias: necesidad de acción, cuyo límite es la necesidad actual o situacional.
La creatividad de los actores sociales dependerá entonces de la siguiente forma:
CREATIVIDAD = (IMAGINACIÓN, necesidades, capacidades de acción)
En cambio el comportamiento tenderá a ser dominado por la capacidad de producción del sistema como el recurso más escaso lo que implica una intersección muy debil entre los espacios de las intenciones, las capacidades y las necesidades.
COMPORTAMIENTO = (imaginación, necesidades, CAPACIDADES DE ACCIÓN)
Por tal motivo, en los casos en que la estrechez del espacio de las capacidades determina una escasa interacción con los otros espacios restrigiendo la imaginación y la satisfacción de las necesidades humanas. En este caso el la escasez de capacidades de producción, ya sean de recursos, organización, conocimientos, etc. conllevan hacia la única alternativa de comportamiento previsible y repetitivo por parte del actor. Ergo, si un actor A desea hacer más previsible la estratégia de su oponente B, lo único que debe hacer es reducir su capacidad de producción coartándolo creativamente.
Prop 1: A mayor creatividad mayor bienestar general.
Prop 2:
- « ‹El Desarrollo Económico Lleva Tiempo› constituiría un lema muy
- apropiado para colocar encima de la entrada de cualquier organismo de
- planificación económica, de modo que se recordase continuamente a los
- transeúntes la verdad desnuda, por más decepcionante que fuese. Pero
- dentro de cada oficina la inscripción debería decir ‹No haga que ese tiempo
- sea más largo en virtud de una inactividad innecesaria›, porque esta última
- da como resultado un derroche de tiempo. Estoy convencido de que
- todos los planes económicos contienen, en mayor o menor grado, 'inactividad
- inconscientemente planeada. No es de extrañar, por tanto, que sintamos
- o incluso reconozcamos ocasionalmente que muchos de los planes de
- desarrollo económico no han sido suficientemente acelerados. Tal vez podría
- haberse evitado todo esto si al planificar el desarrollo económico tuviésemos
- en cuenta la lección económica objetiva del sistema fabril.»
- Nicolae G-R
Referencias
- Entrevista a Carlos Matus (1998). CBA. Disponible en: bit.ly/QmilnS
- Matus C. (1987) «Política, Planificación y Gobierno», Ed. Altadir, Caracas.
- Bernazza C. (2011) «Seminario de Política, Planificación y Gobierno», Notas de clase, Doctorado en Cs. Económicas - UNLM, La Matanza.