Se denominan fases de la luna a las variaciones cuasiperiódicas que experimenta la iluminación de la luna en el transcurso del tiempo. Usualmente se identifican cuatro etapas de esa variación, luna llena (no hay ninguna parte iluminada), cuarto creciente, luna llena (completamente iluminada) y cuarto menguante, ilustradas en la figura inferior.
Las fases de la luna son una consecuencia de las órbitas de la luna alrededor de la Tierra y de la Tierra alrededor del Sol. La duración promedio del ciclo completo visto desde un punto fijo de la Tierra es de 29,53 días, algo más de 29 días y medio, lo que dió origen el mes así como las cuatro fases dieron origen a la semana.
La manera en que se ven las fases de la luna es diferente en el hemisferio norte y el sur. La figura ilustra la forma aproximada en que se ve el desde el segundo, caso de Argentina. Un método simple para identificar si una fase es creciente o decreciente, es que la primera se ve como una letra c y la segunda como una d.