Última modificación el 13 ago 2017, a las 18:12

La Salada

La Salada es una feria de venta de productos, mayoritariamente textiles, que está ubicada en la margen sur del Riachuelo en el Cuartel Noveno del partido de Lomas de Zamora (provincia de Buenos Aires). En aproximadamente 20 hectáreas, tiene unos 10.000 puestos de venta a los que acuden diariamente unas 100.000 personas. Según sus organizadores, cifra probablemente exagerada, de sus actividades viven, incluyendo sus proveedores, unas 300.000 personas. Un fenómeno poco estudiado, para algunos es un emblema del comercio ilegal (se venden allí muchas falsificaciones de marcas registradas), mientras que para otros es una valiosa fuente de ingresos que permite a muchas personas salir de la marginación social.


Puestos de La Salada.

Características

El alquiler del metro cuadrado de terreno para un puesto era a comienzos de 2010 de unos USD 20.000, superior al que se cobra en Puerto Madero. Se estima que las ventas diarias (la mayoría sin factura) superan los U$S 1,2 millones.

Según Enrique Antequera, administrador de Urkupiña (una de las tres sub-ferias que integran La Salada):

Urkupiña es una sociedad anónima que está conformada por 365 socios. Pagamos cerca de 700 mil pesos anuales en impuestos. En esta estructura, cada uno cumple un rol determinado (...) Aquí tenemos gente que estamos recuperando de la calle, adictos al paco; hay unos 20 chicos cada noche, en esa tarea. Luego, tenemos 70 personas en seguridad, que trabajan dentro y fuera del predio. Y también están los carreros, que llevan la mercadería al puesto de cada feriante. Son cerca de 200, que se han recuperado de la calle (...) Tratamos de insertar de vuelta en la sociedad a los chicos que no tuvieron la posibilidad de crecer, de estudiar, de tener un trabajo digno (…) Muchos políticos critican la explotación de los menores, pero… ¿qué hacen por el menor, para insertarlo en la sociedad? (...) Es bravo porque hay que lidiar con algunos chicos que son salvajes. Se han criado en la calle. Cuesta enderezarlos. Tenemos contención sólo dos días a la semana, cuando funciona la feria. Si tuviéramos para darle trabajo todos los días, sería diferente: el chico llega a su casa cansado y se va a dormir, no anda en la esquina paqueándose y tomando cerveza. Pese a que cuesta mucho, esto fue un cambio: acá viene gente de todos lados a buscar trabajo, desde un puesto de choripán a un empleo. Pero cada vez hay menos empleo en el país. No veo una fábrica o empresa extranjera que haya venido a invertir.

Lo que, de ser cierto, es una acabada descripción de un Estado ausente.

En su informe anual 2014 el ministerio nacional de Comercio de los EEUU caracterizó a la feria como el mercado negro más grande Latinoamérica y criticó a la presidente Cristina Kirchner por llevar a dirigentes de La Salada en algunos de sus viajes a otros países[1][2], caso de la visita a Angola con el entonces Secretario de Comercio Guillermo Moreno.

En el año 2017, por primera vez en su historia, los principales dirigentes de la feria fueron detenidos por orden judicial y los puestos desalojados de los lugares públicos.[3]

Fuentes

  • Taffetani, Oscar; La Constitución de La Salada; ARGENPRESS; Ciudad de Buenos Aires; 6 de abril de 2010.
  • Dewey, Matías; El orden clandestino: política, fuerzas de seguridad y mercados ilegales en la Argentina; Katz Editores; Ciudad de Buenos Aires; 2015; ISBN 9789871566976. El 7º capítulo discute el caso de La Salada.