Cómo conducir un automóvil sobre nieve
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Saber cómo conducir un automóvil sobre nieve puede ser un asunto de vida o muerte, o de graves daños a bienes propios y ajenos. Los que nunca lo han hecho no saben qué precauciones tomar ni cómo reaccionar en ciertas circunstancias. Los organismos estatales de Argentina dan escasa o nula información sobre el tema y, salvo las ocasionales recomendaciones de usar cadenas, los conductores están librados a su suerte. Las siguientes son algunas recomendaciones importantes.
Recomendaciones para minimizar los riesgos de conducir un automóvil sobre nieve
Si nunca ha estado en la nieve, una nevada le generará un fuerte deseo de salir en auto a disfrutar del paisaje. Sin embargo, el paseo puede terminar mal si no actúa con las debidas precauciones. Las principales recomendaciones, no necesariamente en orden de importancia, son:
- No use el coche cuando hay nieve o hielo si:
- El coche es de baja cilindrada (menos de 1.000 cm3). El tránsito lento aún en pendientes moderadas es imposible cuando el motor tiene baja potencia.
- Si los neumáticos están demasiado gastados y no tiene cadenas.
- Si no tiene reflejos rápidos o no conoce los principales problemas que puede encontrar y cómo manejarlos.
- Es impaciente o está en estado de tensión.
- Reduzca la velocidad. Sobre caminos pavimentados con una capa de nieve no apisonada de 1 cm, la velocidad máxima recomendable es de 30 km/h. La razón es que sobre nieve la distancia de frenado puede ser hasta 10 veces mayor que la del mismo camino seco.
- No haga maniobras bruscas de giro, de aceleración o de frenado.
- Si el coche comienza a girar sin control no toque los frenos, suelte el acelerador y gire el volante de modo de alinear las ruedas con la dirección del desplazamiento, comportamiento opuesto al usual. Esto permitirá que los neumáticos rueden sin deslizarse, ya que en este caso la adherencia al suelo es mucho menor. Rebaje luego a una marcha inferior para que el motor actúe como freno.
- Si el coche comienza a patinar al subir una pendiente, no acelere, frene suavemente. Liberando lentamente el freno deja que el auto retroceda sobre su propia huella hasta retomar terreno horizontal. La recomendación usual de tomar velocidad para superar la pendiente por mero impulso, no por tracción, puede tener graves consecuencias si el coche patina o se encuentra con otro venículo en descenso. Si no conoce un recorrido de menor pendiente para llegar al lugar deseado, estacione el auto en un lugar donde el riesgo de que lo choque otro auto que patine sea mínimo o nulo. Insistir en el ascenso es una de las principales causas de accidente y termina por regla general con el coche en la banquina o estrellado contra el primer obstáculo.
- Si el coche patina al descender una pendiente, reduzca rápidamente a la marcha inferior y aplique sólo levemente los frenos, con presiones y liberaciones alternadas del pedal. Si la finalización de la pendiente está a la vista y el auto está sobre la huella, es más seguro descender rápido que tratar de frenar.
- Multiplique por 10 la distancia de seguridad al vehículo que lo precede. De este modo, si este vehículo tiene cualquier problema usted podrá detenerse con seguridad hasta que el mismo se resuelva.
- Nunca estacione el coche:
- En la huella de un camino con pendiente. Esto genera problemas graves a los conductores que quieren pasar y usted corre el riesgo de patinar y perder el control.
- En un lugar donde desconoce la profundidad de la nieve. Puede caer en un pozo o simplemente quedar con la base del auto asentado en la nieve mientras las ruedas giran casi libremente.
- Sobre hielo a menos que el terreno sea perfectamente horizontal. Aún una pequeña pendiente puede causar que el auto patine y no pueda remontarla para volver a la huella.
- Con las ruedas tractoras asentadas sobre nieve no firme o demasiado profunda.
- Lleve siempre en el auto una pala de mango corto. Esto le permitirá:
- Despejar la nieve abriendo un surco para los neumáticos.
- Despejar un lugar de estacionamiento.
- Ayudar a otros automovilistas. La solidaridad es la mejor protección.
- Si es de noche y está nevando, use sólo la luz baja, disminuya más la velocidad y aumente la distancia de seguridad a los otros vehículos.
- Use cadenas siempre que sea posible, pero desmóntelas tan pronto llegue a terreno sin nieve para evitar su desgaste y rotura. Tanto para instalarlas como para desmontarlas es conveniente ir a una gomería, su instalación no es sencilla pese a lo que dicen quienes las venden.
- Si la nieve lo sorprende en camino, no tiene cadenas y los surcos de sus neumáticos son poco profundos, desínflelos para aumentar el área de asentamiento sobre el terreno.
- Si va a hacer una maniobra poco previsible, haga señas bien visibles a los demás conductores, tanto con las luces como con los brazos.
- La regla de oro, en todos los casos, es actuar con tranquilidad, sin apresuramiento y, ante la menor duda desistir de circular.
Fuentes
- Las recomendaciones usuales dados por los medios de comunicación social tienen graves errores, tenga el cuidado de no aceptarlas ciegamente.