La '''Texto en negritapandemia de gripe A (H1N1)''' se produjo durante el año 2009, con su primer brote en México.
El único organismo sanitario capaz de identificar al virus fue el Instituto Malbrán, que pronto vio superada su capacidad de análisis, demorando inicialmente muchos días en hacerlos, suspendiéndolos cuando su número había llegado a unos pocos miles. Cuando renunció la ministra de Salud Graciela Ocaña, pocos días después de la elección, su reemplazante declaró que los contagiados no eran los pocos miles informados previamente, sino centenares de miles. Nunca se supo cuál fue la cantidad de fallecidos por causa de este virus porque los análisis identificatorios dejaron de hacerse. Todas las cifras previamente divulgadas, sin embargo, indicaban que en Argentina y en todo el mundo, la mortalidad era mucho menor que la de la común gripe estacional.
El ministro de Salud, Manzur, anunció la inversión de centenares de millones de pesos en compra de equipamiento para hospitales y de gran cantidad de dosis de antivirales para proporcionar gratuitamente a todos los que presentaran síntomas con posibilidad de complicaciones. Nunca se supo ni siquiera cual había sido la verdadera cantidad de muertos a causa de complicaciones de la gripe A (N1H1).
==Denuncia en la Asamblea Parlamentaria Europea==
El 18 de diciembre de 2009 se presentó en la Asamblea Parlamentaria Europea una denuncia firmada por 14 miembros de diferentes países. En traducción libre (no se ha proporcionado versión castellana oficial) dice así:
:''Para promocionar sus patentados medicamentos y vacunas contra la gripe, compañías fabricantes han ejercido presiones sobre científicos y funcionarios responsables de las áreas de salud, para generar alarma en los gobiernos de todo el mundo. Han hecho malgastar recursos sanitarios escasos en estrategias de vacunación ineficientes y han expuesto a millones de personas saludables al riesgo de efectos secundarios de medicamentos insuficientemente probados. Las campañas de "la gripe aviar" de 2005-2006, combinada con la de la "gripe porcina", ha causado mucho daño tanto a pacientes vacunados como a los presupuestos de los organismos sanitarias y a la credibilidad y responsabilidad de inportantes importantes agencias internacionales de salud. La declaración de pandemias no debe quedar sujeta a la influencia de los vendedores de medicamentes. Los estados miembros del Consejo Europeo deben exigir investigaciones urgentes sobre las consecuencias en los países miembros y en Europa toda.''[http://assembly.coe.int/Main.asp?link=/Documents/WorkingDocs/Doc09/EDOC12110.pdf]