La ventaja comparativa de los supermercados frente a los tradicionales almacenes de barrio es su capacidad negociadora, la posibilidad de poder comprar sus productos directamente al fabricantes fabricante y a menor precio al hacerlo en grandes cantidades. Las cadenas más grandes hacen envasar algunos productos bajo su nombre, generando (seguramente de modo deliberado) la falsa idea de que son también fabricantes.
Desde el punto de vista del usuario una de las características más atractivas de los supermercados, que paulatinamente se extiende a otros tipos de comercios, es la posibilidad de inspeccionar y elegir libremente el producto, sin la espera de un vendedor y sin necesidad de recibir explicaciones intencionadas o no deseadas.
* Acumulación de grandes cantidades de productos: disminuye los tiempos de reposición y crea una confortable sensación de abundancia.
* Carros grandes: en comparación con las grandes cantidades de productos de las góndolas, hacen parecer pocas las compras y desear aumentarlas.
* Carros con ruedas trabadas: disminuyen la velocidad de circulación.
* Fraccionamiento: se dejan embolsados o atados los productos que se venden sueltos, como las hortalizas y las plantas de apio, para promover la venta en mayor cantidad. Se dejan los grandes tallos de verduras como los broccoli, que favorecen su conservación pero no son comestibles. No se da información sobre el carácter lícito o ilícito de los fraccionamientos.