Arándano azul

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Arándano Azul Vaccinium corymbosum.

El arándano azul (en inglés un tipo de blueberry) designa a una planta perenne y a su fruto comestible, de agradable sabor y buenas propiedades nutritivas[1], nativo de América del Norte. En Argentina ha sido introducido como cultivo comercial en las provincias de Buenos Aires, Chubut, Entre Ríos, Río Negro y Tucumán. La cosecha del fruto, que en 2009 alzanzó las 13.000 t, se hace mayoritariamente entre los meses de septiembre y diciembre y se destina mayoritariamente a la exportación.


Rasgos principales

El cultivo es relativamente reciente en Argentina, donde en 2004 la variedad más cultivada era la Southern Highbush (Vaccinium darrowii) cuya variedad O´Neal representaba del 50% al 60% de la producción. Esta variedad temprana comienza su producción a comienzos de octubre en la provincia de Entre Rios. Otras variedades cultivadas en esa época eran la Gulf Coast, Rabbit, and Misty. La falta de experiencia de los productores ha requerido un largo aprendizaje por ensayo y error (en febrero de 2011 no parecían haber estudios del INTA sobre estos cultivos). El tema más difícil es el de las plagas, ya que la experiencia de otros lugares del mundo usualmente no es aplicable. La exportación de los frutos del arándano se hace mayoritariamente a países de altos requirimientos fitosanitarios, como EEUU y Europa, lo que obliga a cuidados especiales en la aplicación de pesticidas.

El arándano es afectado por el exceso de calor y de humedad. Puede empezar a producir a los 3 años en lugares como Entre Ríos, a los 3 en otros lugares, y tiene buen rendimiento por unos 10 años. Para promover el buen crecimiento de la planta se recomienda eliminar brotes durante la etapa preliminar. La polenización de las flores, esencial para la formación de los frutos, se hace en un 80% por abejas mediante colmenares que se instalan de a 6 por hectárea. Como las abejas no sienten atracción natural por esta planta, hay que eliminar fuente alternativas de néctar. Desde este punto de vista es conveniente plantar varias variedades con tiempos diferentes de maduración de los frutos, de modo que las abejas se habitúen a sus flores.

La producción es intensiva en capital y en mano de obra calificada. Los cultivos de alta productividad usan irrigación por goteo, sistemas contra heladas y granizo, control constante del estado sanitarios de las plantas. En el estudio sobre Debilidades y desafíos tecnológicos del sector productivo, en el sector Frutas Finas (arándano, cerezas, frambuesas, frutillas y moras) se señala la existencia de los siguientes problemas:

  1. Pérdida de producto en la cosecha por ausencia de sistemas anti-granizo, anti-heladas y protecciones contra el viento en gran parte de las plantaciones.
  2. Baja capacidad y tecnología de frío en campos productores, comercializadoras y en unidades móviles para una adecuada conservación y transporte de la fruta.
  3. Baja capacidad del personal para la ejecución de los cuidados del cultivo.
  4. Baja mecanización de las actividades de cosecha de frutas finas.
  5. Escasa capacidad de empaque, poco mecanizada o/y con tecnología insuficiente para el desarrollo de productos con valor agregado.
  6. Falta de trituradores, pulpadoras y tamizadoras para alcanzar una granulogía suficientemente fina en la elaboración de dulces.
  7. Baja capacidad para esterilizar (autoclavar) dulces de bajas calorías, chutney y conservas.
  8. Escasa información de los productores sobre los requerimientos y procesos para la certificación orgánica de productos.
  9. Falta de un adecuado desarrollo genético que adapte el producto a las demandas de los mercados internacionales y/o a las condiciones climatológicas o zoosanitarias.
  10. Falta de experiencia en investigación y desarrollo para la buena industrialización del producto.

El consumo nacional de arándano estaba inicialmente limitado a emprendimientos artesanales, los dulces de las comarcas patagónicos cercanas al paralelo 42, como San Carlos de Bariloche, El Bolsón y algunas localidades de Chubut. Este consumo ha ido aumentando gradualmente a medida que el fruto se incorporaba a los menúes de heladerías, restoranes de alta gama de toda Argentina y a los sabores ofrecidos por las empresas de productos lácteos. Así el mercado interno que era casi nulo en 2001, subió a casi 2.000 t en 2009. La siguiente tabla da algunos datos de la producción entre los años 2001 y 2009.


Año 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009
Producción (t) 330 800 1.500 13.000
Superficie (ha) 400 1.600
Fuentes [2] [3] [4] [5]


En 2009 los principales compradores externos de arándano fueron EEUU (65%) y el Reino Unido (20%) a donde se envían los frutos congelados. El volumen exportado de arándano fresco, similar al año anterior, fue de 10.400 t, a un valor promedio de USD 7.600 por tonelada.

Fuentes